Ejercicio 4

Industria mexicana en la segunda mitad del siglo XIX

Mina de Cananea, Sonora a principios del siglo XX

Taller de fundición de la mina Cananea, Sonora. Principios del siglo XX.
Con la siguiente actividad comprenderás las causas del auge minero durante el Porfiriato.

Ejercicio de escritura

 

Da clic en las siguientes imágenes, lee atentamente el siguiente fragmento de texto y responde las preguntas. Al finalizar da clic en comparar para recibir retroalimentación.

De acuerdo con las dos lecturas,

1.¿Cuáles son los factores externos que propiciaron el auge minero durante el Porfiriato?

Los autores coinciden en que durante el Porfiriato, en el contexto del imperialismo capitalista, las potencias mundiales invirtieron grandes sumas de capital en la industria mexicana, esto se debe al repunte de los metales en el mercado internacional; las nuevas actividades económicas; la introducción de nuevos procedimientos de extracción y tratamiento de los mismos metales. Asimismo, Estados Unidos, Inglaterra y Francia se abocaron al establecimiento de nuevas empresas en territorio mexicano.
 

2.¿Cuáles son los factores internos que fortalecieron el desarrollo minero durante el Porfiriato?

El auge minero en México se posibilitó debido a una serie de políticas estatales enfocadas en el:

  1. Fortalecimiento de una red de transportes (principalmente financiado por capital extranjero).
  2. Otorgamiento de derechos de propiedad: en 1884 una modificación constitucional otorgó a los propietarios de la tierra derechos sobre el subsuelo que hasta ese momento pertenecía a la Nación.
  3. Crecimiento del mercado interno.
Para comparar tu respuesta debes concluir el ejercicio.
 

Durante el Porfiriato, México entró en un ciclo de crecimiento económico. La producción aumentó en todos los sectores, tanto en términos absolutos como en la magnitud relativa por habitante. En promedio, el PIB creció 2.7% al año durante el periodo, mientras que la población aumentó 1.4%. Este comportamiento de la economía se debió a importantes transformaciones en la estructura productiva, el mejoramiento de los transportes y las diversas demandas de los mercados nacionales y extranjeros. La tendencia progresiva no estuvo exenta de crisis, como las de la caída del precio de la plata en la década de 1890 y la crisis internacional de 1907-1908, que ocasionó la baja en los precios de los productos de exportación; además, el proceso se caracterizó por fuertes contradicciones sectoriales, regionales y sociales. El proyecto liberal de modernización de México requería fuertes inversiones de capital. (…) La minería se transformó debido a las políticas estatales, las condiciones del mercado internacionales, la aplicación de nuevas tecnologías y las grandes inversiones de capital. La producción de metales preciosos (oro y plata) tuvo incrementos significativos, pero la novedad fue la explotación de minerales industriales (hierro, plomo, antimonio, zinc, mercurio y grafito) y la producción de energía (carbón y petróleo). La causa más importante del auge minero fue la inversión extranjera, propiciada por las nuevas leyes que otorgaron la propiedad a los particulares.

Fragmento recuperado de: Sordo, R. y Sierra, M. J. (2010). Atlas conmemorativo: 1810-1910-2010. México: Siglo XXI, p. 140.

 
 

La aparición en México de la moderna empresa minera tuvo que ver con una corriente de inversión de capital y de transferencia tecnológica del extranjero, que indujo modificaciones substanciales en la organización de la producción y en los tradicionales sistemas y prácticas productivas. Fueron los ingleses los que inauguraron, consumada la independencia, esa corriente de capital y el transvase de tecnología. Pero la época dorada del fenómeno ocurrió entre 1880 y 1914. Los especialistas en la materia coinciden en el monto global de las inversiones extranjeras en México para 1911. Ésta fue del orden de 3.282.108.360 de dólares. También en el porcentaje correspondiente al país de origen. En términos generales, se ha señalado un 64.46% perteneciente al capital norteamericano, seguido por los ingleses con 19.58%, y muy atrás, pero ocupando un tercer lugar, los franceses con 8.74%. (…) La minería había experimentado un repunte después de las crisis mundiales de plata (1873 y 1885-1886), y los metales preciosos, el metal amarillo en primer lugar, se cotizaban a buen precio en los centros financieros internacionales..

Fragmento recuperado de: Uribe, J. A. (s.f.). Los minerales del Oro y Tlalpujahua en el concierto internacional de los siglos XIX y XX. Facultad de Economía/Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo. Recuperado de http://www.economia.umich.mx/economia_oldsite/publicaciones/EconYSoc/ES15_10.html (octubre, 2013).

 

Alumno: