La imprenta e información prohibida en la Nueva España
Ejercicio de escritura
Lee el texto que se presenta a continuación, reflexiona y responde las preguntas. Al finalizar da clic en comparar para recibir retroalimentación.
(…) el Concilio Provincial Mexicano (1555), en su capítulo LXXIV insistía sobre el peligro que representaba la imprenta y la difusión de libros considerados dañinos. Para remediar el problema de los libros prohibidos, se pide que no se imprima o publique ninguna obra que no sea revisada por la Inquisición y quien lo hiciera sería excomulgado y pagaría una multa de 50 pesos para obras pías. Se les prohibía a los libreros comprar sin autorización so pena de excomunión y multa de 100 pesos, tampoco podían vender. Pedían a todos los que tenían libros los llevaran para su aprobación so pena de 50 pesos y excomunión. Que no se vendieran libros a los indios porque se ofendía a Dios (…) se prohibió que los indios tuvieran biblias y sermonarios.
El Index Librorum Prohibitorum suministró el más completo catálogo de libros heréticos, de versiones no autorizadas de la Biblia, de libros de ciencia heterodoxos y de obras de adivinaciones, sortilegios y magia.
A pesar de la vigilancia y control ejercidos por las autoridades civiles y eclesiásticas, existía un intenso contrabando de libros, la técnica seguida era pasarlos en barricas de vino, toneles de fruta seca o en cajas de doble fondo. Pasaban a la Nueva España obras de Erasmo, biblias heterodoxas. Circulaban obras clásicas de Homero, Plutarco, Virgilio, Cicerón, Ovidio, Marco Aurelio, Lucano, Terencio, Petrarca, etcétera (…) eran mercancías pagadas a muy buen precio y valía la pena el riesgo.
Vargas, C. (s.f). Los libros prohibidos por la inquisición novohispana del siglo XVI. Recuperado de http://www.dgbiblio.unam.mx/servicios/dgb/publicdgb/bole/fulltext/volIX2/inquisicion.html (septiembre, 2013).